El PRI salva la cabeza en Tabasco al imponerse por la mínima al PRD en las elecciones locales

 Ciudad de México .- 
Con el 95 por ciento de los votos escrutados, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) aparecía ayer como el virtual ganador de las elecciones locales celebradas el domingo en el estado mexicano de Tabasco por apenas un punto porcentual. Los últimos resultados proporcionados por el Instituto Electoral de Tabasco, que hacen referencia a 628.229 votos, dan como ganador al candidato del PRI, Manuel Andrade, quien obtendría el 44,13 por ciento, seguido por Raúl Ojeda, candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que habría logrado el 43,13 por ciento.
    El candidato del PRI se proclamó como ganador y aseguró que cuenta con informes que lo respaldan como el triunfador de los comicios. En declaraciones a la Prensa, Manuel Andrade señaló que si la oposición no está de acuerdo con el resultado «debe acudir a los órganos oficiales a levantar las denuncias que correspondan conforme a la ley». Por su parte, Raúl Ojeda, del PRD, afirmó que no reconocerá otro resultado que no sea el del triunfo de su partido, ya que los datos con los que cuenta su formación indican que él ganó la contienda. Se da como prácticamente seguro que el PRD impugnará los resultados si las cifras finales le son adversas.   
«Aspiración personal»
A pesar del punto porcentual de ventaja para el PRI, los resultados de la jornada del domingo representan un duro revés para este partido, que ya perdió los comicios generales de julio pasado y los locales celebrados hace dos meses en Chiapas, pues Tabasco es un estado en el que PRI siempre había tenido gran hegemonía. No obstante, el actual gobernador de este estado sureño, Roberto Madrazo, afirmó que continuará con su «aspiración personal» de convertirse en el próximo mes de noviembre en el siguiente presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
    Antes de depositar su voto, Madrazo señaló que en la elección de Tabasco todo México se estaba jugando la posibilidad de construir un futuro más democrático. «Lo que se está jugando es el futuro de un país más democrático, que pueda, a través de procesos claros y democráticos, respetados por todos en sus resultados, construir una nueva etapa, y esta nueva etapa la deben de construir todos los partidos», dijo.